Blogia
El Puente. León Molina

El brillo de los días

El brillo de los días

El periodista albaceteño Juan Ángel Fernández acaba de publicar el libro El brillo de los días, subtitulado La cultura albaceteña del siglo XXI.  El libro ha llegado a mis manos con cariñosa dedicatoria de amigo, de viejo compañero en lides musiqueras, radiofónicas y sobre todo en las agotadores lides de divertirnos mucho con la vida. Y así, me puse a echarle un vistazo inicial para leerlo después, pero caí atrapado y me lo zampé entero completamente complacido. Juan Ángel me había hablado algo del libro mientras trabajaba en él y yo saqué la equivocada conclusión de que era un libro que pretendía ser algo así como un registro de artistas albaceteños en apogeo. Pero al adentrarme en él descubro que es un libro de buen periodismo, que toma como excusa sus conversaciones con los artistas para crear narraciones muy frescas, muy cercanas, llenas de vida, que nos hacen navegar por sus líneas con auténtico entretenimiento y placer.  Pero además en efecto el libro nos da a conocer algo de artistas albaceteños de alto nivel y gran interés. Para mí por esta razón es también un libro entrañable; algunos de esos artistas hace mucho tiempo hacían los deberes a un lado mientras su padre y yo hablábamos de libros y músicas, con otros me he divertido sin piedad en las largas noches de juventud, música y alcohol, alguna de esas artistas fue una dulce y añorada compañía, y hay también jóvenes a los que he conocido hace poco y admiro por su sensibilidad y algún otro que reconozco me ha sido descubierto por el libro de Juan Ángel.  Una nómina de artistas cuyo conocimiento  ya de por sí harían imprescindible la lectura de este libro. Artistas de un gran nivel de todas las disciplinas que han dedicado su vida muchas veces con gran sacrificio, sobreponiéndose  y siempre con soledad a construir lo que quizás sea más valioso de nuestra comunidad; sus obras, lo mejor que quedará de nosotros aunque muchos ni siquiera sepan que así es.  Nos sorprende de nuevo Juan Ángel Fernández, otro visionario, un tipo que mandó hace mil años al carajo un mullido futuro de bancario para tirarse sin red al mundo de la música y la radio. No tenía vocación de periodista, pero el periodismo siempre estuvo cerca de su vida y, mira tú por dónde, casi sin darse cuenta, acabó siendo periodista, que destila ahora sus mejores esencias en este libro que desde aquí animo a leer para conocer del arte y los artistas en Albacete y, sobre todo, para pasar un buen rato.

0 comentarios